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miércoles, 20 de junio de 2012

D.Blake 2ª Parte/ Capitulo 70


La gente dice que a medida que se cumplen años, las cosas a tú alrededor cambian... pero yo no lo veía así, al contrario mi vida seguía siendo tal y como era antes de cumplir los diecinueve.
Cuando desperté esa mañana lo primero que vi, fue a Harry dormido, incluso era mas guapo. Aquellas mañanas me encantaban, el hecho de despertarme y tenerle a mi lado, para decirme esos buenos días que tan bien sonaban en su boca o darle un beso nada más despertarse cuando aún tenía los ojos cerrados por la luz y decía que le dejara cinco minutos más. Habrá agente que lo llamaría rutina pero yo esa rutina no la cambiaría por nada del mundo.
Sin embargo la rutina de tener que levantar e ir a la universidad era un autentico suplicio. Las cosas por la facultad habían cambiado el bando Rebeca había perdido fuerza con la marcha de Lizy, aunque nadie pensaba que fuera un punto importante. Prácticamente Lizy no tenía amigos asique pasaba los recreos sola, cosa que me daba mucha pena, no se la veía tan mala como hacía unas semanas, es más parecía simpática.
- A mi Lizy me da mucha penita. - dijo Kate mientras nos sentábamos en la mesa. - no sé a lo mejor puede ser amiga nuestra.
- ¿Pero que dices?. - Dijo Mike llevándose las manos a la cabeza. - te da pena ahora, pero espera que se vuelva a buscar otro grupo con quien poder machacar a a gente lo rápido que se le pasa. ¿A que si Blake?
- No sé a mi también me da mucha pena, no parece que sea tan mala.
- ¿Pero que os pasa a vosotras dos? Desde que tenéis novio se os olvidan las cosas, sobre todo a ti Blake, te recuerdo que esa formó parte en el plan para destruirte cuando llegaste y querías estar con Harry.
- Puede que lo hiciera porque Rebeca se lo mandara Mike, nunca lo sabremos. Además todos tenemos una segunda oportunidad. - dije mirándole de reojo. - Todos.
- Vosotras veréis. - dijo enfadado.
Puede que Mike llevara razón y no deberíamos confiar de ella aún , pero a mi verla sola me partía el alma, había pasado de ser la mas popular a la más odiada por Rebeca incluso delante de mi y eso era un gran paso.
Lo siguientes días en la universidad fueron asquerosos estaban llenos de exámenes asique a penas tenía tiempo para nada, me tiraba todo el día en casa encerrada o en la biblioteca de la universidad sin levantar los ojos del libro, solamente deseaba que todo terminara para poder hacer lo que me diera la gana. El ultimo examen fue el más difícil de todos, la gente salía llorando del aula cuando entregaban el examen sin embargo otros no paraban de escribir en las dos horas de examen. Cuando por fin salí del examen Harry estaba esperándome fuera, en cuanto le vi salté encima de él para que me cogiera.
- ¡¡Por fin somos libres!! te he echado mucho de menos esta semana, sin poder verte ni besarte cada vez que me diera la real gana. - dije mientras no paraba de besarle.
- Pues ya no nos tendremos que preocupar más por eso, el curso está a punto de acabar y tendremos todo el verano para nosotros.
- ¿Me llevarás a la playa?
- Pues claro que si, te llevaría al fin del mundo si tú me lo pidieras.
- Te quiero.- mientras nos besábamos mi teléfono empezó a sonara.- Un momento. - me baje se sus brazos y descolgué el teléfono.
- ¿Quien era?. - dijo Harry detrás de mi.
- Era Ben, Vicky ya ha tenido a la niña. - me abracé a Harry. - Le prometí que en cuento naciera iría a verla, sé que la ultima vez que te pregunté esto me dijiste que no, pero ¿querías acompañarme?
- Sí.
- Ya sé que es una mala idea pero... ¿Que has dicho?
- Que si que nos vamos los dos juntos.
- ¿En serio? Si es que eres... eres el mejor del mundo.
Esa misma tarde Kate y Louis nos estaban acompañando al aeropuerto para coger el vuelo a Londres, me parecía mentira que Harry estuviera cogido de mi mano mientras pasábamos por la puerta de embarque a tan solo dos horas de volver al lugar de donde hacía casi un año había dejado atrás con la esperanza de empezar una nueva vida, que claramente había conseguido.
- ¿Estás nerviosa?
- No, estoy histérica, son tantas cosas las que dejé atrás que me da miedo enfrentarme de nuevo a ella.
- Pues esta vez estoy yo aquí. - Harry se acercó a mi y me dio un beso. - no te preocupes por nada.
En el fondo quería creerle, pero yo sabía perfectamente que tarde o temprano me encontraría a Trevor y lo peor de todo era que no sabía cual iba a ser mi reacción al verle.
Dos horas mas tarde estábamos aterrizando en Londres y mis nervios aumentaron notablemente, en el aeropuerto estaba esperándome mi coche ya que le dije a mi madre que me lo llevara allí, le había echado de menos aunque nunca me dí cuenta, cuando le dije a Harry que montara, me recordó a mis últimos días en Londres.
- Bonito coche. - dijo Harry mientras nos dirigíamos hacia Holmes Chapel.
- Gracias, que te pensabas yo aquí tenía todo lo que quería y más. - dije sonriendo.
- No deberías de haberte ido entonces.
- Estás loco y perderme el día que choqué contigo, créeme cambiaría esto una y mil veces si pudiera estar contigo.

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