Follow me, please :)

miércoles, 20 de junio de 2012

D.Blake 2ª Parte/ Capitulo 68.


Después de las vacaciones de semana santa apenas quedaba tiempo para que empezara el ultimo cuatrimestre de la universidad y por lo tanto era el más importante, a pesar de que la gente decía que con solo cinco asignaturas todo era mucho más sencillo era todo mentira, te jugabas el curso en cada examen que tenías.
Entre unas cosas y otras nuestro viaje a Roma se iba posponiendo cada vez más asique decidimos aparcarlo durante un tiempo, hasta que tuviéramos el tiempo suficiente como para irnos sin tener preocupación alguna y como eso últimamente era imposible se quedaría bastante tiempo estancado y mira que me sabía mal pero era irremediable.
Los meses próximos al verano iban pasando y mi cumpleaños también se estaba acercando, Harry no paraba de preguntarme que quería por mi cumpleaños y yo siempre le daba la misma respuesta, nada. Sabía que no se daría por vencido hasta que le contestara pero él sabía que no le pensaba decir nada.
La ultima semana de Mayo llamé a Vicky para ver que tal estaba y para saber cuando salía de cuentas para poder ir a verla en cuento me enterara que la pequeña Lux había nacido ya.
- Esto es horrible Blake, no puedo no con mi alma, no puedo andar, no para de comer, tengo un calor sofocante durante todo el día y no me vale, ningún pantalón, es horrible tengo que ir con falda siempre, incluso hay veces que no sé ni que zapatillas me pongo porque no puedo ni atarme los cordones con esta pedazo de barriga.
- ¿Y que esperabas? Tienes un bebé dentro no una pelota de tenis, tendrá que crecer digo yo.
- Sí pero podía salir ya, aunque a ese momento le tengo verdadero pánico.
- Bueno piensa que despues de ese dolor insufrible, tendrás a tu niña.
- Gracias por tus ánimos Blake, “insufrible dolor” me dejas mucho más tranquila sabiendo que un niño saldrá por mi pusy en menos de dos semanas.
- ¿Dos semanas? ¿tan pronto?
- ¿Tan pronto? aguanta tú los nueve meses bonita.
- Vicky las hormonas te están afectando demasiado eres incluso más bipolar que antes, relajate un poquito.
- Lo siento, es que estoy muy nerviosa, las clases pre-parto te acojonan más créeme, no vallas nunca si puedes evitarlo.
- Está bien. - dije riéndome.
- Bueno ¿y tú como vas con tus cosillas, tus exámenes y eso...?
Pues de momento bien no veo la hora de que llegué el 5 de junio para irme de ese sitio tan horrible, no soporto a Rebeca cada vez la odio más.
- Pasa de ella es lo mejor, tu estate a lo tuyo y verás como todos será muchísimo mejor, por cierto que ¿creo que es el cumpleaños de alguien mañana?
- ¿Así? Pues no sé ahora mismo no caigo.
- Pues es el tuyo imbecila, ¿de quien va ser sino?
- Ya sabía que era el mio ¿vale? Solo que no me gusta recordarlo, tía que son 19 años ya, esto es horrible me hago mas mayor cada vez y ya me estoy empezando a preocupar por las arrugas.
- ¿Pero tu eres así de tonta o entrenas por las mañanas? Pero que dices de arrugas anda anda exagerada, pues si que empiezas pronto mona.
- No puedo evitarlo. - después de hablar con Vicky, me puse a terminar los deberes que me había mandado la profesora de filosofía, era increíble que a estas alturas del curso nos mandara escribir un texto sobre el amor, siempre dijeron que el amor se sentía y que era difícil de expresar con palabras, pues se ve que esta mujer se perdió ese capitulo de barrio sésamo. Después me metí en la cama y me dormí en menos de cinco segundos.
Eran las nueve de la mañana cuando todos entraron en mi habitación chillando y tirándome confeti por todo la habitación, mi primera reacción fue pegar un grito por haberme despertado y ponerme la almohada sobre la cabeza para que se callaran.
- ¡FELICIDADES BLAKE!. - Gritaron todos a la vez, el primero en acercarse a mi fue Mike que se puso a saltar en mi cama para espabilarme, mientras que Niall y Louis tiraban de las sabanas, despues todos se echaron encima de mi dándome besos, abrazos y tirándome de las orejas.
- ¡Ah parar que me las vais a arrancar!.
- Anda ya exagerada, despiértate ya. - me dijo Kate dándome un gran abrazo.
Por mas que miraba por todos los lados al único que no veía era a Harry y sinceramente me molestó bastante que él no estuviera allí con todos los demás, para darme el mejor beso que podía recibir por mi cumpleaños.
Mientras todos chillaban, llamaron a la puerta de mi habitación, salí corriendo de la cama y abría la puerta y allí estaba él, al único al que quería ver, Harry me felicitó y me dio el mejor beso de mi vida, despues los demás empezaron a toser y no pude evitar reírme, por un momento se me había olvidado que estaban allí.

- Que gran escena de amor pero vamos que hoy tenemos muchas cosas que hacer de momento nos vamos a ir de compras y no me vale un no por respuesta despues nos iremos a comer todos juntos y despues ya se nos ocurrirá y la noche te la dejamos toda para Harry, creo que la disfrutará más que nosotros. - dijo Louis.
- Oye lo que yo haga con mi novio es asunto mio, ¡cotillas!. - despues de desayunar me metí en mi habitación a vestirme y me puse el modelito que me había mandado mi madre para mi cumpleaños.

Aquel día nos fuimos de compras aunque la que mas se llevo fui yo evidentemente, despues fuimos a comer a un sitio súper chulo que Niall nos había recomendado, sin dudarlo el entendía de lo que hablaba, sobre las ocho empecé a recibir mensajes de mis amigos de Londres y la llamada de mi madre desde Londres donde eran aproximadamente las 11 de la mañana. Hablé durante bastante rato con mi madre, la decía la mucho que la echaba de menos le contaba cosas de la universidad, de mis amigos de Harry incluso algunas cosas sobre papá pero nada en especial, despues de contarle casi toda mi vida, le dije todo lo que me habían regalado y ya me tuve que despedir de ella, me tenía que ir con Harry como habíamos planeado.
- ¿A donde vamos?. - le dije mientras me montaba en una limusina negra. - Siempre te empeñas en llevarme a ciegas a los sitios.
- Eso es lo bueno de todo esto...
Mientras hablábamos yo me había desorientado de hacia donde me estaría llevando tan misteriosamente, cuando estaba averiguando donde es, el coche se detuvo y Harry abrió mi puerta y me tendió una mano para que saliera.
- Odio que me hagas estas cosas, luego sabes que no duermo.
- Shh... - Dijo poniendo un dedo sobre mis labios. - Date la vuelta.




No hay comentarios:

Publicar un comentario