D.Blake 2ª Parte/ Capitulo 77

- No me puedo creer que tú madre os pillara.

- Pues creelo Vicky, además de lleno, estaba en bragas, tenías que haberla visto la cara, aunque despues empezó a descojonarse.

- Normal tía, tú madre sabe que tienes tus relaciones con tu novio y más si le has dicho que casi te quedas preñada.

- Bueno vale si, pero no es lo mismo decirlo que verme despues de estar en acción o por lo menos eso parece, tía no me acuerdo de nada de esa noche. Bueno me refiero a nada después de llegar a casa lo mismo me quedé dormida.

- Pues que putada anda que perderte un polvo con tu novio... lo mismo ha sido el mejor hasta ahora.

- ¡¿Pero que dices Vicky?! Que sepas que todas son geniales ¡tss!

- Ah, ¿asique es una maquina sexual en la cama el ricitos?

- No voy a contestarte a eso, y menos delante de la niña.

- Claro ni que se enterar de algo la pobrecita mía, además estará curada de espanto la pobre, no ves que me tiene a mi de madre.

- Eres increíble. Bueno que te vas a comprar llevamos media hora dando vueltas por aquí y no te gusta nada.

- Ya lo sé pero es que es todo horrible tía.

- Pues tía yo me tengo que ir, que he quedado...

- Con Harry si ya lo sé me lo has dicho tres veces ya, tranquila además yo he quedado con mi madre aquí quiere compararle cosas a Lux, ya sabes lo pesada que se pone.

- ¿A quien se parecerá?

- ¡Oye!

- Anda, anda me voy ya ¿vale?. - me acerqué al carro de lux y la cogí en brazos. - Si es que cada día estas mas guapa, que cosita más mona, cada vez se parece más a ti Vicky. - volví a dejar a la niña en el carro y me despedí de Vicky.

- Recuerda que me debes una tarta de chocolate de las nuestras.

- Tranquila que no se me olvida. Te quiero.

Dejé a Vicky en el centro comercial y me dirigí hacia mi casa andando ya que habíamos ido en el coche de Vicky para meter todos los trastos.
Pasé por mi antiguo instituto y me entró mucha nostalgia de pensar en todos los momento que había vivido allí.
Pasando el cruce que llevaba hasta mi casa donde había quedado con Harry, vi que Trevor estaba saliendo de su casa y se dirigía a su 4X4 con las gafas de sol y una bolsa de deporte, cuando entro en el coche yo me cambié de acera para evitar que me viera pero fue inútil en cuanto me vio, salió disparado del coche y vino corriendo hacia a mi.

- Blake por favor. - Trevor me cogió para que parara pero sacudí el brazo y me soltó. - tienes que escucharme.

- ¿Para que? No creo que nada de esto merezca la pena ya, a pasado demasiado tiempo, tú yo ya no tenemos nada que ver.

- Yo pienso que si.

- ¿Así pues dime algo que ya no sepa de ti? Eres el mismo de siempre, un putero y nunca vas a cambiar, eres un cerdo. Ni siquiera cambiaste por mi.

- Pero ya te pedí perdón.

- ¿En una carta?

- No me dejaste explicarme antes de que te fueras.

- ¿Y que querías? que hiciera como si nada hubiera pasado, eras mi mundo aquí, estaba dispuesta a dejarlo todo por ti. Y por muchas cartas que escribas pidiéndome perdón, no creo que lo haga, me hiciste mucho daño.

- Nunca recibí una contestación por tu parte. Para mi no ha sido fácil tampoco estar sin ti todo este tiempo.

- ¿Acaso importa ya? Me dijiste que querías que fuera feliz con alguien que supiera apreciarme mejor de lo que tu hiciste... y ya lo he hecho, así que olvidame de una vez. - miré el reloj preocupada por si Harry me veía con él.

- ¿De verdad ya estás con otro?

- Sí y me ha hecho más feliz en este tiempo de lo que tú lo hiciste jamás, así que déjame seguir con mi vida, estoy mejor sin ti.- me dispuse apartarle pero no se movió un solo centímetro. - déjame pasar.

- No puedo dejarte ir otra vez.

- ¡¡Pues hazlo y dejame en paz!!. -dije gritando.

- Es que no entiendes que no puedo hacerlo... - iba a contestar cuando Trevor se abalanzó sobre mi y me besó.

Recuerdos, simplemente eso, recuerdos de aquellas tarde de verano, de aquel primer día juntos de aquella primera vez, todo se me amontonaban de golpe dentro de mi, pero todo se desvanecía y el odio volvía a mi incluso con más intensidad que antes. Trevor insistía en ese beso pero yo no me movía, mis labios estaban apretados los unos con los otros y mis manos estaban sujetas por las suyas, miré a un lado y allí estaba Harry viendo esta escena tan lamentable, no me podía creer que me hubiera hecho eso, Trevor lo sabía, sabía que Harry estaba apunto de venir y nos vería besándonos juntos y que todo esto se acabaría.
Harry se dio la vuelta y echó a correr mientras Trevor miraba y sonreía al verme la cara.

- Eres un hijo de puta, si antes tenías la mínima oportunidad de que te perdonara con esto lo has perdido, eres... eres... - las palabras no salían de mi boca, se me agrupaban todas en la punta de la lengua pero ninguna podía salir.

- ¿Que soy Blake? . - el seguía sonriendo y mi odio cada vez aumentaba más y más y sin poder evitarlo junté los dedos sobre mi palma y le dí un puñetazo en la cara.
Trevor se echó hacia atrás maldiciéndose pero no me importó le le pegué una patada en sus partes lo más fuerte que pude, se dobló en el suelo y empecé a darle por todos los lados, no podía parar de darle, era tal odio el que sentía que no era consciente de mis actos, alguien me agarro por detrás y me separó de él pero yo hice lo imposible por zafarme de sus brazos y volver a por Trevor, al ver que no podía perdí todas mis fuerzas y caí al suelo mientras lloraba y gritaba que le odiaba.
Me levanté como pude y corrí hacia casa lo más deprisa posible y cuando llegué las cosas ya no estaban allí, Harry no estaba.

- No, no puede ser.... ¡¡¡¿Por qué?!!! no por favor.

Subí a mi habitación y tampoco estaba, así que cogí el coche y me fui hacia el aeropuerto. Le busqué por todas partes pero no había rastro de él, me senté en un banco y entonces recordé a su abuela, cogí de nuevo el coche y fui corriendo hacia la casa de Helen y efectivamente allí estaba.

- Tienes que dejar que le vea, por favor. Tengo que explicárselo. - y empecé a subir las escaleras.

- Blake es mejor que te vallas, no quiere hablar con nadie.

- Pero... - las lagrimas volvieron a brotar de mis ojos. - tengo que... - de repente todo se volvió negro y caí redonda al suelo.