Capitulo 16

El Verano iba pasando, tan rápido que apenas me estaba dando cuenta, la relación con mis amigas no podía ir mejor, con Trevor las osas estaban tan bien que apenas pensaba en los días que nos quedaban para estar juntos antes de que yo me tuviera que ir, solo faltaban un mes para que todo acabara y yo me tuviera que ir a Manhattan.
Al principio intenté llevarlo lo mejor posible pero cada día me arrepentía más de hacerlo,no quería separarme de Trevor, estaba siendo demasiado duro más de lo que yo había imaginaba.
Vicky intentaba que no me preocupara por nada y siempre lo conseguía, constantemente me estaba contando sus cosas con Ben, parecía que por fin había admitido que lo que tenía con él, era una relación seria, esas que tanto odiaba pronunciar.
Las ultimas semanas mis amigos me estuvieron ayudando a embalar todas mis cosas, quería llevarme todo lo posible para que me pudiera sentir como en casa, Trevor se quedaba algunas noches conmigo en casa mientras que mi madre estaba fuera, pero nunca podíamos terminar nada siempre venían a molestar nuestros amigos, se había convertido en una tradición para ellos, pero siempre encontrábamos alguna oportunidad para estar solos.
Todo parecía perfecto hasta que llego el ultimo mes, con mis amigas estaba todo bien, pero los problemas eran con Trevor, discutíamos siempre por tonterías, que yo ni siquiera entendía, el salía una noche si y otra también con sus amigos, como lo hacía antes de estar juntos estaba volviendo a ser, ese chico que tanto odiaba, se volvió insoportable y por más explicaciones que le pedía siempre contestaba con indiferencia como si yo ya no le importara y eso era lo peor que me pedía hacer y más él, al único a quien le había dado todo de mi, el chico al que confié todos mis sentimientos que parecía que habían desaparecido.
Una noche empezó a llover muy fuerte y yo estaba sola en casa, era lo una y media de la madrugada cuando llamaron a la puerta, caminé muy despacio y le vi allí parado en la puerta empapado, llorando como si fuera un niño, al principio me asusté, no entendía que hacía aquí tan tarde, asique nos sentamos en el sofá juntos, mientras él intentaba calmarse para hablar conmigo.

- Si no te tranquilizas, no vas a poder decirme nada, asique respira.

- Eso intento, pero cuando te tengo delante... - empezó otra vez a sollozar.

- ¿Tan malo es lo que vienes a decir? No creo que sea peor que lo que ha pasado estas ultimas semanas.

- Eso es lo que intento decirte, quiero que entiendas porque he estado así.

- Pues soy toda oídos.

- Blake tú sabes de sobra que te quiero más que a nada en el mundo, pero no puedo imaginarme que haré cuando tu no estés aquí conmigo, cuando no te pueda ver todos los días, o poder abrazarte y besarte cada vez que lo necesito, no puedo Blake, lo intento pero no puedo.

- Trevor los dos sabíamos que esto iba a pasar, sabíamos que no sería fácil, para ninguno de los dos.

- Lo sé pero no creí que fuera tan difícil.

- Aún así ¿no entiendo porque te has comportado así conmigo?

- Porque creí que si volvía a ser el de antes, ese al que tanto odiabas, dejarías de quererme y así yo podría olvidarte antes.

- ¿¡Pero que gilipollez es esa!? ¡Crees que si hubieras echo eso me hubiera olvidado de ti tan fácilmente, Trevor, volví a empezar contigo, crees que eso se olvida porque vuelvas a ser el mismo prepotente de siempre!

- Sé que no que lo único que he echo a sido hacerte daño Blake.

- Por lo menos eso lo tenemos claro los dos.

- Lo siento de verdad, haré lo que sea para que me perdones Blake.

- No creo que haga falta que hagas nada, sé que me has echo mucho daño, pero no quiero pasar estas dos semanas, sin estar junto a ti asique no hace falta ni que me lo pidas,te entiendo por una parte, aún que lo podrías haber hecho de otra manera, tú no sabes lo que ha sido pensar durante semanas que la culpa de todo era mía y que por irme tan lejos me estuvieras odiando por lo que te estaba haciendo.

- Nunca pensaría eso.

- Eso espero porque yo nunca me esperé estar contigo, lo veía como algo imposible, sin embargo se ha convertido en una realidad.

- Yo siempre esperé que se cumpliera, y cuando sucedé no paro de cagarla constantemente.

- No digas eso, tú no la cagas constantemente, es cierto que metes la pata, pero sabes arrepentirte a tiempo de las cosa que has echo mal, siempre lo has echo.

- Blake quiero que sepas que pase lo que pase yo te quiero a ti.

- ¿Y que va a pasar?

- Nada, no va a pasar nada pero quería que lo supieras.

- ¿Te quedas conmigo? Ya sabes que me dan miedo las tormentas.

- Claro. - Abrió sus brazos para que yo me pusiera en su regazo, estuvimos en silencio pero no me importaba sabía que lo había recuperado, aunque, aún notaba cierta preocupación en él, pero no quería volverme paranoica, solo quería disfrutar de él y estar juntos. Poco a poco el sueño fue venciendo y acabamos los dos dormidos en el sofá, el uno junto al otro como si nada hubiera ocurrido.