Diario de Blake

Capitulo 5

Casi era la hora de comer y seguíamos intentando montar las tiendas todos excepto Lucie que estaba demasiado cansada como para hacerlo menuda vaga estaba hecha y su novio ni te cuento menudo morro que tenían la parejita feliz, ya le veía tirados en el saco durante todo el día mientas que los demás estábamos haciéndoles las cosas.

- Ejem, ¿vosotros dos pensáis hacer algo? Lo digo porque no somos ciados vuestros Lucie y vale que seas cómoda pero esto es pasarse un poquito, no dejas de protestar y encima te escaqueas de todo.

- Venga no te pongas así, ya me levanto a ayudaros, protestona. - me dio un beso en la mejilla y se puso con Ben a terminar la tienda de Vicky, mientras que Lucas preparaba la mesa con la sombrilla blanca enorme de la terraza de mi madre.

Estábamos todos tan ocupados que no me di cuenta de que Trevor acababa de llegar con Zac.

- Lo siento no he podido librarme de él. - dijo encogiéndose de hombros y sonriendo como siempre hacía cuando algo no le salía como esperaba

- No importa cota mas mejor, ¿que es todo eso?

- Pues la comida algo tendríamos que traer nosotros ¿no?

- No hacía falta con que hubieras traído tu tienda de campaña hubiera valido.

- Mierda sabía que algo se me olvidaba, pues nada dormiré a la intemperie esta noche.

- Si claro, tu duermes conmigo mi tienda es enorme, además creo que Zac ya tiene compañera de tienda hoy. - miramos hacia Zac y Nath, estaban muy agusto juntos y
además se gustaban estaba claro, por eso a Nath no le había importado que Trevor viniera sabía que si el lo hacía, Zac también.

- Bueno pues sino te importa, tienes un vecino en la tienda.

- Claro que no me importa eres bienvenido a mi hogar jajaja. - comenzamos a reíros los dos como dos idiotas, Trevor me hacía sentir bien mejor que nunca al vez Vicky tuviera razón y Trevor estaba entrando de nuevo en mi vida, pero las expectativas e él no era las mismas que las mías estaba seguro, pero bueno aún no sabía que nos depararía ese fin de semana, quizás encontrara mi ultimo amor antes de irme.

- Voy a preparas las cosas para comer, ¿me ayudas Blake?

- Claro, pero tu sabes como va esa barbacoa, la verdad que Zac es un ideitas que tela marinera.

- No te preocupes juntos lo averiguaremos.- me cogió de la mano y me llevó hacia la barbacoa empezamos a encenderla y parecía que funcionaba, despues de morirnos de calor a causa de el maldito fuego que no se encendía ni a tiros, acabamos por conseguirlo, no pude remediarlo y de la alegría que me dio me abracé a él, mientas los demás empezaron a aplaudir debido a la escena tan tierna que acababan de presenciar, me puse como un tomate y me bajé haciendo como si nada.
Los chicos empezaron a hacer la comida mientas que nosotras poníamos la mesa para así poder comer rápido estábamos muertos de hambre.
Después de comer nos pusimos los bañadores y nos fuimos al arroyo a darnos un baño encontramos una laguna pequeñita pero lo bastante profunda donde poder meternos por lo menos hasta la cintura aunque con lo fría que estaba era mejor que no, pero siempre hay algún gracioso que te coge en brazos y te tira de sopetón y ese era Zac, a Nathaly le hacía gracia que la cogiera en brazos, pero claro pensando que estaba colada por él no era para menos que se lo estuviera pasando como una enana, Vicky y Ben estaban por un lado liándose constantemente, en el fondo me daban un poco de envidia se les veía tan bien juntos, era el uno para el otro aunque ella dijera que no, estaba claro que al final acabaría diciendo que era una relación seria como a ella no le gustaba llamarlo, pero hay veces que las cosas son inevitables por mucho que te esfuerzas, como lo que me estaba pasando a mi, cada vez Trevor era mas especial para mi y pensándolo bien el abrazo de este medio día no lo había rechazado, o tal vez no lo había hecho porque sabe que soy muy sensible desde lo que pasó con Cam, prefería pensar que no, que era por eso, no quería que nada me atará aquí, necesitaba tener esa beca y olvidarme de todo, pero porque ahora me entraban estas dudas, yo estaba segura de que quería, alejarme de aquí aunque eso me matara y comenzar de nuevo una nueva vida aprender de mis errores.

- A ver ¿ que esta pensando esta cabecita loca?

- Hola... no te había oído llegar.

- De eso se tratara de sacarte del trance.

- Trevor, respecto a lo del abrazo de antes, lo siento, creo que me he pasado un poco.

- Que va hombre es normal casi morimos de hambre por ese cacharo, pero hemos sido más fuertes, no tienes que pedirme perdón, además ese abrazo me ha encantado y sobre todo si viene de la pequeña Blake.

- Que idiota eres, ¿como si mis abrazos fueran comparables con los de tus admiradoras?

- Pues claro que no, prefiero los tuyos antes que los de ellas, los tuyos son sinceros, ellas lo hacen por la popularidad y créeme estoy harto de eso.

- ¿Pero creía que te gustaba ser popular? Tienes un séquito de tías locas por ti es lo que mas deseabas desde enano y ¿ahora que lo tienes no lo quieres? eres increíble.

- ¿De que sirve tener cien chicas detrás de ti, si la única que te importa no lo hace?

-Puedes preguntárselo, es una idea un poco anticuada pero puede funcionar, además eres un chico increíble, eres guapo, simpático, sensible pero a la vez tienes ese punto de chulería único en los Bolton eres lo que cualquier tía busca, lo digo en serio.

- Vaya, gracias, no sabía que pensabas eso de mi, ¿así que ese punto de chulería os vuelve locas, eh?

- Si, bueno, pero sin pasarse de listo, que lo mismo te puedes llevar algún golpe no deseado.

- Gracias Blake. - se acercó a mi y me besó en la mejilla, lo que hizo que me ruborizara levemente, así que levanté y le invité a bañarse conmigo.
Pasamos la mayor parte de la tarde allí, jugando en el agua o simplemente jugando a las cartas, si era lo típico pero allí no teníamos muchas mas cosas que hacer, se empezó a hacer tarde asique decidimos irnos hacia el campamento, Lucie y Vicky se pusieron a hacer la cena y yo mientras salí a dar una a vuelta para despejarme aún no era muy de noche y necesitaba estar sola un momento para pensar sin que nadie me interrumpiera, cuando volví estaban todos esperándome para cenar, cuando terminamos estuvimos hablando durante un rato mientras que nosotras bebíamos chocolate caliente, porque para estar en Junio hacía bastante frío por la noche, sentía como se me cerraban los ojos a causa del cansancio, así que me despedí de todos y me fui hacia mi tienda, a los 5 minutos Trevor entró se metió en el saco junto a mi, me abracé a él y me quede dormida respirando su dulce olor.